martes, 5 de enero de 2010

GARCINIA CAMBOGIA, UN POTENTE “QUEMAGRASAS” NATURAL




La Garcinia Cambogia es una planta originaria de la India especialmente valorada por el Ácido Hidroxicítrico que no sólo ha demostrado ser efectivo para saciar el apetito y limitar la ingesta de alimentos sino que además inhibe la litogénesis y es uno de los “quemagrasas” naturales más potentes que se conocen. Además, no provoca efectos secundarios ni produce efecto rebote cuando deja de tomarse. De ahí que sea un remedio natural para ayudar a controlar el sobrepeso y prevenir problemas cardiovasculares.


Garcinia es el nombre de un género de árboles y arbustos que pueden encontrarse en Asia, el sur de África y la Polinesia aunque la especie Cambogia sólo se produce al sur de la India.

Externamente el fruto de la Garcinia Cambogia parece una pequeña calabaza amarillenta con la que se obtiene un extracto muy interesante desde el punto de vista terapeútico ya que se ha demostrado ser eficaz para aminorar el apetito y limitar la ingesta de alimentos, inhibir el proceso por el que el cuerpo produce y almacena grasas no deseadas y eliminar las que ya se han depositado en los adipositos.

¿Cuál es su secreto?

El Ácido Hidroxicítrico. Hablamos de un derivado del ácido cítrico al que se atribuyen las propiedades para suprimir el apetito, provocar sensación de saciedad y evitar que se almacenen en el cuerpo ácidos grasos y colesterol así como para quemar los lípidos ya depositados en los adipositos.
¿Y qué es lo que hace a este ácido tan peculiar?
Pues los procesos enzimáticos que logra inhibir en el interior del cuerpo, en otras palabras, ese ácido impide la biosíntesis de grasas en el cuerpo.

¿Y cómo lo logra?

Cuando la ingesta de calorías procedentes de los hidratos de carbono excede la energía que necesita el organismo ese exceso es convertido en glucógeno para almacenarlo como depósito de energía de uso rápido en el hígado y, sobre todo, en los músculos. Y cuando la cantidad de glucógeno almacenada es ya suficiente el hígado manda un mensaje al cerebro para decirle que ya es suficiente y así hacernos sentir “llenos”. Además, acelera el proceso de quema de grasas en el hígado. La importancia de esta propiedad es la capacidad para acelerar la quema de grasa acumulada y no tanto la de bloquear la formación de grasa nueva. Y lo logra aumentando la temperatura del cuerpo –fenómeno que se conoce como “termogénesis”- ayudando con ello a los metabolismos lentos.

PROPIEDADES DE LA GARCINIA CAMBOGIA
Disminuye la síntesis de grasas, incluyendo el colesterol “malo” y los triglicéridos.
Aumenta la producción de glucógeno en el hígado.
Reduce el apetito.
Bloquea el aumento de peso.
Acelera la quema del exceso de grasas en el hígado.
Aumenta la termogénesis.
Protege los capilares sanguíneos.
Tiene efecto digestivo, astringente, antiséptico y antibacteriano.
Ayuda a prevenir infecciones.
Alivia los problemas de las encías.
Es útil en casos de dolencias estomacales, intestinales e indigestiones crónicas.
Sirve para aliviar las molestias ocasionadas por el reumatismo.
Es ideal para los deportistas (les proporciona más energía e impide que se almacenen las grasas).
No desarrolla tolerancia.
No produce efecto rebote si se deja de tomar.
Pueden tomarla los diabéticos.

SIN EFECTOS SECUNDARIOS
Terminamos recordando que además de por la propiedades mencionadas la Garcinia Cambogia es diferente a otros supresores sintéticos del apetito porque sólo actúa a nivel hepático, no atraviesa la barrera hematoencefálica y, por tanto, no penetra en el cerebro y no afecta al sistema nervioso central. Es además eficaz aunque se tome durante largo tiempo. Sin provocar los efectos secundarios que generan los fármacos sintéticos y que van desde la depresión, al nerviosismo, el insomnio, la hipertensión arterial o la taquicardia. Ni produce efecto rebote cuando deja de tomarse.
Sepas, por último, que a dosis normales la Garcinia Cambogia no provoca reacciones indeseadas; ni siquiera leves. Así que si decides a tomarla –Forever Garcinia Plus (Ref: 071)- lo adecuado es que la ingieras entre 30 y 60 minutos antes de las principales comidas con un gran vaso de agua.
Obviamente los efectos del Ácido Hidroxicítrico se potenciarán –y los resultados se apreciarán de forma más rápida– si optas además por una forma de alimentación baja en grasas.
En suma, un remedio natural para saciar el apetito antes de cometer excesos o para ayudar al organismo cuando esos excesos ya se reflejan en el volumen de nuestro cuerpo. En todo caso, una herramienta natural, efectiva e inocua que puede prevenir numerosas dolencias y contribuir a mantener nuestra buena salud.

lunes, 4 de enero de 2010

Amigas y amigos.
Con la llegada del año 2010, espero que a cada uno de ustedes se cumplan todos los planes y proyectos en los cuales tengan participación, acompañado de una vida saludable..
Quiero compartir con ustedes algún material que servirá para analizarlos.
Y sacar algunos conceptos que hoy iremos entregando.
Esta es la primera entrega de una serie que publicare periódicamente.
Nelda
Acerca del Doctor Weston A. Price

A comienzos de 1930, un dentista norteamericano llamado Weston A. Price empezó una serie de investigaciones únicas. Durante los siguientes diez años el Dr. Price viajó a lugares remotos en el mundo para estudiar la salud de poblaciones a las que la civilización occidental no hubiera afectado todavía.

El objetivo de sus investigaciones se centró en tratar de averiguar cuáles eran los factores responsables de una buena salud dental. Sus estudios revelaron que las caries dentales y la deformación de los arcos dentales (que resultaban en dientes torcidos y apiñados), eran el resultado de deficiencias nutricionales y no de defectos genéticos heredados.
Los grupos que Price estudio incluyeron villas aisladas en Suiza, comunidades gaélicas (Escocia, Irlanda y la isla de Man), indígenas de Norte América, melanesios y polinesios, tribus africanas, aborígenes australianos y neocelandeses, y tribus indígenas de América del Sur. Los elementos comunes que el Dr. Price encontró entre estos grupos nativos que se alimentaban de dietas tradicionales propias del lugar fueron: dientes parejos y hermosos, ausencia de caries, apariencia física atractiva, resistencia a enfermedades y buenos temperamentos.
Cuando el Dr. Price analizó los alimentos usados por estos grupos aislados encontró que, en comparación con la dieta americana de su época, éstos contenían al menos cuatro veces más vitaminas hidrosolubles (hidro-agua), calcio y otros minerales; y, al menos, DIEZ veces más vitaminas liposolubles (lipo-grasa) de origen animal, como mantequilla, hueveras, mariscos y órganos - hoy en día, estos mismos alimentos son considerados por el público norteamericano como alimentos ricos en colesterol y peligrosos para la salud.

El Dr. Price descubrió que estas vitaminas liposolubles -vitaminas A y D- promueven la absorción de minerales y la utilización de proteínas por el cuerpo. Sin estas vitaminas nuestro cuerpo no puede absorber minerales, aún cuando éstos se encuentren en cantidades abundantes en los alimentos que ingerimos. También descubrió un nutriente liposoluble al que llamó el Activador X, presente en pescados, mariscos, órganos y mantequilla de vacas que se han alimentado de pastos verdes que estaba creciendo activamente (primavera y otoño.) Todos los grupos primitivos incluían en sus dietas algún alimento que contenía este Activador X.

La importancia de la nutrición previa a la concepción era comprendida por estas comunidades tradicionales. Varias tribus requerían que el futuro padre y la futura madre se alimentaran con alimentos ricos en nutrientes durante el periodo previo a la concepción. Este mismo tipo de alimentos se consideraba importante para mujeres embarazadas, mujeres que estaban dando de lactar y para niños en edad de crecimiento. Price descubrió que este tipo de alimentos era particularmente rico en minerales y en los activadores liposolubles que se encuentran sólo en la grasa animal .
Estos grupos aislados que el Dr. Price fotografió -con cuerpos atractivos, facilidad para reproducirse, estabilidad emocional y ausencia de enfermedades degenerativas-, resaltan al ser comparados con los grupos civilizados modernos. Estos últimos han sustituido las dietas tradicionales por productos del comercio moderno, incluyendo azúcar, harina blanca, leche pasteurizada, alimentos bajos en grasas y alimentos procesados llenos de aditivos y otros químicos.
Los descubrimientos y conclusiones del Dr. Price se presentan en su libro "Nutrición y Degeneración Física". El libro contiene fotografías impresionantes de indígenas saludables y de buena constitución, así como fotografías de la degeneración física que ocurre cuando esta sabiduría milenaria es abandonada por la conveniencia de los productos modernos.
Estas fotografías que el Dr. Price tomo a dos niñas seminoles muestran la cara hermosa y con amplio espacio para dientes parejos de una niña bajo una dieta tradicional (izquierda), y la cara estrecha, con dientes apiñados y menos resistencia a enfermedades, de una niña que nació de padres que habían adoptado una dieta "civilizada" de productos procesados y desnaturalizados (derecha.)